PALABRAS DEL GENERAL DE DIVISIÓN CALÍXTENES ARMANDO FUGUET RAMIREZ PRONUNCIADAS EN LA SESIÓN DE LA JUNTA DIRECTIVA DE LA FUNDACIÓN 10 DE DICIEMBRE LLEVADA A CABO EN LA CASA LOS ANDES EN MARACAY, ESTADO ARAGUA EL 02 DE OCTUBRE DE 2010.
Mis queridos compañeros y mejores amigos, no nos olvidamos ni menospreciamos de ninguna manera nuestros lugares de nacimiento o crianza, para ratificar una verdad innegable que cada día se arraiga profundamente en nuestros corazones, esa verdad es, el amor que sentimos por nuestra querida Maracay. Esa Maracay de ayer y de siempre, cuando nos conocimos desde la época de cadetes, alumnos y profesionales aeronáuticos. Porque en realidad, los sentimientos que se cultivan en aquellas épocas doradas de la vida, no pasan ni se extinguen con el correr del tiempo, porque está escrito que mientras más nos acercamos a aquellos días venturosos, más sinceras son nuestras emociones y más puros nuestros sentimientos; por eso, hoy estamos acá.
Con vuestra venia, desearía de todo corazón al dirigirme a Uds., que mis palabras pudieran hacer el milagro de transmitir fielmente el recuerdo de aquella querida Fuerza Aérea y sus diez de Diciembre, que se tiende como un puente de oro entre ese pasado tan bello, tan lleno de inolvidables recuerdos y el presente, que revive y fortalece aquello que nos es tan grato evocar en el ánfora de cristal de nuestros mejores sentimientos, motivos por el cual, me he atrevido a leer algunos párrafos de las palabras pronunciadas por el Dr. Agustín Álvarez Zerpa en sesión solemne homenaje a la Fuerza Aérea Venezolana por su 61 aniversario el 10 de Diciembre de 1.981 y en donde el orador de orden fue mi apreciado y distinguido amigo el G/D Maximiliano Hernández Vásquez.
Muchos de Uds. se preguntarán, que tienen que ver las palabras pronunciadas en esa sesión solemne del Dr. Agustín Álvarez Zerpa con la reunión que se convocó ésta mañana. Yo personalmente digo, que significa la simbiosis de esa unión indescriptible de pueblo de camisa y smoking, aunado a la falda y el lindo rostro de La mujer aragüeña que contribuyó a que todos o la gran mayoría de los aviadores llegados a Maracay de los cuatros puntos cardinales de Venezuela, echáramos raíces al formar nuestros hogares y quedarnos para siempre en ésta querida tierra. Además es oportuno el momento para recordar y tener siempre presente el día de nacimiento de nuestra Fuerza como institución, el 10 de Diciembre de 1.920, para que con ahínco, amor y fortaleza, trabajemos todos los integrantes de la Fundación en todo Io concerniente a los compromisos suscritos.
Decía el Dr. Álvarez Zerpa en su disertación:
“Con la sinceridad y el respeto de siempre, ofrezco esta Sesión Solemne a las Fuerzas Aéreas Venezolana, con motivo de su Aniversario de haber sido instituida, a nombre del Concejo de Girardot, como gesto reiterado de simpatía y adhesión permanentemente, por Io que ella significa y representa para la colectividad que representamos. Esta noble institución germinó en las autoridades ejecutivas de entonces, se hizo realidad mediante un Decreto, para iniciar su camino ascendente hasta ahora, hoy ramificada en los más apartados rincones de la geografía nacional, como medio de seguridad y garantía de segura y eficiente defensa territorial, y contribuir también a extender la cultura, educación y asistencia social a los más lejanos y distantes lugares de la patria y fuera de ella, cuando es necesario y la solidaridad humana lo requiere, que solo pueden acometerse con las alas y el impulso de la tecnología moderna, y la voluntad de servicio de los hombres que a través de los tiempos, han tenido en sus manos la conducción de nuestra aviación militar.
“Al Orador de Orden, General de División MAXIMILIANO HERNANDEZ VASQUEZ, Comandante General de la Aviación, le da excusas, “Si distraigo con mis palabras a la audiencia que se ha dado cita en éste auditórium, para oír las suyas, como mensaje y torrente de expresión institucional con ocasión de éste aniversario que celebramos. Pero me parece oportuno, a nombre de mis compañeros de Cámara y en el mío propio, decir las razones morales e históricas que nos unen a la aviación militar venezolana, que no puede ser, aunque ella ya serla bastante, la inscripción de su partida de nacimiento en la ciudad jardín, que lo llevamos como timbre de orgullo frente a nuestros demás hermanos venezolanos.
“LOS ANTECEDENTES.
“Concluida la primera conflagración mundial, por el excedente de material de guerra en Europa y América del Norte, habla necesidad de explorar mercados, fundamentalmente en el uso de éste instrumento modernísimo del aeroplano, como le decíamos entonces, que si bien nació y sirvió inicialmente para la guerra, podría aprovecharse y aplicarse para la paz. Motivado el gobierno, adscribió por lo último, y desde aquellos días, la Patria forjada por nuestros libertadores para la paz, concordia y convivencia pacífica entre naciones, reforzó sus cuadros de defensa con proyección estrictamente profesional, sin perspectiva belicistas, sólo atendiendo al progreso que a través de la aviación militar podría derivar para el pueblo venezolano. Y así comenzó un nuevo rumbo castrense.
“IDENTIDAD. PUEBLO E INSTITUCIÓN.
“Como se inicia la integración, la identidad del pueblo de Maracay, de Aragua toda, con sus Fuerzas Aéreas, La Grita, ese pueblito de ayer, tan querido y recordado espiritualmente por nosotros, fue ofreciendo el contingente. Muchachos de temprana edad, después de cumplir allá su ciclo preparatorio de formación militar, legaban a la ciudad tranquila con su carga de ilusiones y sus anhelos de definitiva profesionalización en el campo de la aviación. El encuentro del joven sencillo de todas las latitudes con la bonhomía del joven maracayero, cuajaron la simbiosis. Amigo el cadete, amigo el estudiante, amigo el obrero, amigo para siempre en la ruta de la vida. No importa el camino, el éxito, las vicisitudes; por encima de cualquier circunstancia, favorable o adversa, el respeto, fruto de un encuentro sincero, a la inquebrantable amistad celosamente cultivada, Si pudiéramos hablar de rivalidad entre nosotros, ciertamente la hubo, la que da la emulación en el deporte. No podíamos permitir que nos vencieran los aviadores, teníamos que ganarles, y testigo es el Liceo Agustín Codazzi de estas escaramuzas estudiantiles. Y algo que sacudía nuestro derecho de ser gallos del corral. Me refiero a esa rivalidad con los cadetes que en formación oian misa en la catedral de San José, que con su plantaje juvenil y su uniforme de gala, atraía la atención de las muchachas. Esta costumbre hermosa debe revivirse.
“Como los matemáticos, el corolario, el L.Q.Q.D. (Lo Que Queríamos Demostrar), es evidente. Esta sesión Solemne no envuelve un simple cumplido institucional. La Aviación Militar Venezolana está profundamente anclada en el corazón de los maracayeros de cualquier época. Nacieron para el progreso de la patria, y la cosecha es ubérrima. Han desenvuelto varias etapas en su devenir, pero su signo claro, por la raíz de pueblo que nutre la institución, es la de vivir en libertad plena y democrática, como las aves de raros pero atrayentes plumajes, como los poetas, que en su mundo incontaminado, sueñan realidades e irrealidades, a manera de bellas utopías”.
He traído a propósito párrafos de las palabras pronunciadas por el Dr. Agustín Álvarez Zerpa para reafirmar el sentimiento, amor y respeto que siente el pueblo aragüeño por nuestra Institución que está sembrada en su corazón y en el de todos los venezolanos y de ésta forma iniciar el proyecto de la fundación con alegría y fuerza emprendedora que atisba con éxito el futuro.
GRACIAS, MUCHAS GRACIAS
